Un tanque Imhoff es un pozo decantador que permite sobre todo una buena separación de las materias en suspensión. Normalmente tienen forma de cilindro vertical, donde el agua circula favoreciendo la decantación de los sólidos que caen al fondo y fermentan sin presencia de aire. Los gases resultantes de este proceso (metano) son conducidos hasta la superficie.
Normalmente (habría que conocer las características específicas de un tanque en particular) son tanques muy pequeños y sobre todo sirve para separar las grasas, por lo que es ideal ponerlo a la salida de la cocina. En una construcción nueva se puede instalar como pre-filtro antes de la fosa.